Así como el Sistema Nacional de Áreas Protegidas de Chile crece, también lo hacen los desafíos para proteger los recursos naturales mientras se intenta maximizar el disfrute de sus crecientes visitantes.
Por Cristóbal Pérez
Nota del Editor: La siguiente es la versión completa de un artículo de la Edición 16.
Cuando pensamos en parques nacionales, nuestra mente de inmediato nos transporta a lugares imponentes e indómitos, llenos de naturaleza y vida. Zonas de una riqueza enorme en términos de flora, fauna y paisajes, que la mayoría de las veces representan el sello identitario de un área geográfica en particular, y que en definitiva motivan a gobiernos e instituciones a realizar grandes esfuerzos de conservación.